jueves, 16 de septiembre de 2010

UNA CONVOCATORIA A LA TRANSPARENCIA

Me declaro vivo, saboreo cada acto antes cuidaba que los demás no hablaran mal de mi entonces me portaba com los demás querían y mi conciencia me censuraba.

Menos mal que a pesar de mi esforzada buena educación siempre hacia alguien difamándome.

¡Cuánto agradezco a esa gente que me enseñó que la vida no es un escenario!

Desde entonces me atreví a ser como soy.

El árbol anciano me enseño que todos somos lo mismo.

Soy guerrero:
Mi espada es el amor.
Mi escudo el humor.
Mi hogar la coherencia.
Mi texto la libertad.

Si mi felicidad resulta insoportable, discúlpenme, no hice de la cordura mi opción. Prefiero la imaginación a lo indio.

Es decir, inociencia incluida.

Quizás solamente teníamos que ser humanos.

Sin amor, nada tiene sentido
Sin amor, estamos perdidos
Sin amor, corremos el riesgo de estar de nuevo transitando de espaldas a la luz.

Por eso es muy importante que sea el amor el único que inspire tus actos.

Anhelo que descubras el mensaje que se encuentra detrás de las palabras; no soy un sabio sólo un enamorado de la vida.

La meta no existe, el camino y la meta son lo mismo.

No tenemos que correr hacie ninguna parte, sólo saber dar cada paso plenamente.

Cuando somos más grandes que lo que hacemos, nada puede desequilibrarnos.

Pero cuando permitimos que las cosas sean más grandes que nosotros, nuestro desequiligrio esta garantizado.

Quizás sólo seamos agua fluyendo el camino nos lo tenemos que hacer nosotros. Más no permitas que el cauce esclavice al rio, no sea que en vez de un camino tengas una cárcel.

La gente esta tan acostumbrada a ser infeliz, que la sensación de felidad le resulta sospechosa.

La vida es un canto a la belleza, una convocatoria a la transparencia.

OS PIDO PERDÓN PERO.... ¡ME DECLARO VIVO!